No More Learning

Las víc­ timas de la radiación de Hiroshima y Nagasaki, que se reunieron poco tiempo después con las víctimas del calor de los primeros minutos y se­ gundos -en casos innúmeros también con una demora de años o dece­ nios-, hicieron expreso el conocimiento de que la existencia humana está incluida continuamente en una compleja atmósfera de ondas y radiacio­ nes, de cuya realidad sólo pueden damos testimonio, en tal caso, ciertos efectos indirectos, pero nunca percepción           alguna.